Cómo leer etiquetas nutricionales

En el supermercado, muchos productos parecen saludables a simple vista, pero sus etiquetas nutricionales cuentan otra historia. Aprender a interpretarlas puede ayudarte a tomar mejores decisiones sobre tu alimentación.
Las etiquetas nutricionales incluyen información sobre calorías, grasas, carbohidratos, azúcares y sodio. Pero es importante también revisar la lista de ingredientes: mientras más corta, mejor.
6 Consejos para leer etiquetas
- Busca la etiqueta en el producto.
- Fíjate en las porciones. En la mayoría de los casos, la etiqueta no se refiere a todo el envase; pueden ser varias porciones en el mismo envase.
-
Lee la lista de ingredientes. Los ingredientes se ponen en orden de mayor a menor según lo contenido en el alimento. Mientras menos ingredientes tenga el producto mas natural es y por lo tanto para nuestro cuerpo es mucho mejor.
- Checa los porcentajes. La etiqueta generalmente se basa en una dieta de 2000 kcal. Una dieta de 2000 kcal no es ideal para todos.
- Fíjate en los carbohidratos. Tanto la fibra como el azúcar son parte de este grupo. El azúcar puede ser de alguna fruta o algún carbohidrato; para saber si realmente contiene azúcar añadido hay que revisar la lista de ingredientes.
- Checa el colesterol y el sodio. Un alimento es bajo en colesterol tiene menos de 20 mg por porción. Es bajo en sodio si tiene menos de 140 mg por porción.
Algunos ingredientes pueden tener nombres poco conocidos. Aprende a identificar azúcares añadidos, grasas trans y aditivos dañinos para evitar sorpresas en tu dieta.
Si un producto tiene una lista extensa de ingredientes que no reconoces, probablemente sea ultraprocesado.
Optar por alimentos naturales y frescos siempre será la mejor opción.
Tomar el control de tu alimentación comienza con leer etiquetas. Aprende a identificar lo que consumes y mejora tu salud con decisiones informadas.