¿SABES QUE SON LOS EQUIVALENTES?

Seguro has escuchado  alguna nutrióloga decir vamos a llevar una alimentación por equivalentes pero… ¿Qué quiere decir eso? no es una dieta sino es una forma sencilla de poder llevar a acabo tu alimentación y entender qué, cómo y cuánto debes comer.

El Sistema Mexicano de Alimentos Equivalentes (SMAE) es un método útil para el diseño de planes de alimentación, en especial beneficia a las personas que necesitan controlar la ingestión energética y equilibrar su ingestión de nutrimentos para obtener un peso corporal saludable.

 Se basa en el concepto “Alimento Equivalente”, es decir, aquella porción o ración de alimento cuyo aporte nutrimental es similar a los de su mismo grupo en calidad y cantidad; lo que permite que puedan ser intercambiables entre sí. Los alimentos equivalentes están calculados con base en: El peso neto de los alimentos, es decir, sin cáscara, semillas, ni huesos y espinas.

Los alimentos se agrupan de acuerdo a sus características  y los principales grupos son:

  • frutas
  • verduras
  • cereales
  • leguminosas
  • origen animal
  • leche
  • grasa
  • azúcar

Los grupos anteriores también contienen sub grupos, los cuales de determinan en base a su cantidad de grasa o proteína.

Algunos ejemplos de sub grupos son:

  • Cereales con grasa
  • Grasa con proteína
  • Azúcar con grasa

Algunas de las recomendaciones que te puedo dar para utilizar los equivalentes es lo siguiente:

  • Puedes hacer cambios de alimentos mientras sean del mismo grupo
  • Utiliza taza medidora, cucharas medidoras y báscula para que tus cantidades sean correctas

En el siguiente cuadro podremos ver de acuerdo a los grupos mencionados cuanta cantidad de Calorías o energía, proteína, lípidos, e hidratos de carbono de los alimentos.

tabla de equivalentes

 

Algunos ejemplos de alimentos equivalentes son:

tabla de equivalentes

Para concluir quiero  recomendarte que para llevar a cabo tu alimentación debes escoger lo  que más te acomode y te funcione, ya sea menú o equivalentes no hay nada bueno ni malo.

Recuerda siempre acudir con tu nutrióloga para personalizar tu alimentación.

L.N. Cristina Davison

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